El sector de las renovables ha sido embajador de la Comunidad foral por todo el mundo desde su implosión en la década de los 90. La región desempeñó un rol protagonista en la popularización de la energía eólica con parques pioneros y empresas fabricantes que pronto se situaron entre las más relevantes a nivel mundial.
Tres décadas después, numerosas empresas siguen la estela de aquel primer impulso promoviendo proyectos disruptivos que quieren reinventar y revitalizar la industria regional.
La apuesta por el hidrógeno verde, el repowering, o proyectos referentes como el parque fotovoltaico más grande del mundo, diseñado desde la Comunidad foral, son algunos ejemplos de ello.
Cuando en 1994 empezaron a girar en Navarra los primeros seis aerogeneradores instalados en la comunidad, nadie habría anticipado que en menos de una década la región sería líder mundial de la industria eólica. Lo que empezó casi por azar con el descubrimiento de un cañón de viento muy propicio para la industria —en un tiempo en el que los parques eólicos solían instalarse en zonas costeras—, pronto se convirtió en la palanca que dio forma a una floreciente industria en tiempo récord.
En menos de una década, Navarra pasó de ser importadora neta de energía a contar con numerosos parques dedicados a la producción eólica y empresas referentes a nivel mundial. Las firmas regionales asumieron un rol protagonista en ese proceso. Por citar solo algunas, la vasca Gamesa (hoy Siemens Gamesa tras la fusión con el negocio de renovables de la multinacional alemana) se encargó de la fabricación de numerosas turbinas y Energía Hidráulica de Navarra (EHN) en el principal operador de parques de la región, alcanzando nueve parques en 1998, entre los cuales figuraba el que en su inauguración fue el mayor emplazamiento eólico de Europa. Hitos como este valieron a la firma ser premiada por el Financial Times como la mejor compañía mundial de renovables en el año 2000.
Hoy, ambas empresas cuentan con sedes en la Ciudad de la Innovación de Sarriguren, a las afueras de Pamplona. Junto a ellas se ubican otras entidades muy relevantes para el sector como Ingeteam Power Technology o el Centro Español de Energías Renovables (CENER). Ellos son algunos de los principales protagonistas de una industria que en Navarra aglutina a más de 110 empresas, 6.400 puestos de trabajo y una facturación de 4.500 millones de euros lo que supone un 5% del PIB Regional.
Los datos relativos a la producción de energías renovables en Navarra ilustran el peso que tienen en el mix energético global. Según el informe ‘Avance del informe del sistema eléctrico español 2021’, publicado por Red Eléctrica, recoge que la Comunidad foral incrementó la generación de energía renovable el año pasado en un 21,9 % frente a 2020, alcanzando una producción de 4.271 gigavatios hora. Un crecimiento impulsado principalmente por la contribución de la energía eólica, que aumentó su producción en un 34,7 %. La eólica es una de las fuentes más relevantes en el mix energético navarro (36,9%), solo superado por el ciclo combinado (40,5%).
“Hay muchas sinergias en las capacidades que se necesitan para desarrollar una turbina eólica y para producir un electrolizador. Nuestra intención es desarrollar una tecnología que el mundo compre y Navarra exporte”.
Luis Blanco
Nordex
Proyectos referentes en múltiples subsectores
La mayor prueba de la privilegiada situación de la industria de renovables navarra es el hecho de que las empresas de la región siguen impulsando proyectos pioneros y referentes a nivel industrial, tanto en subsectores consolidados como el eólico y el solar o en tecnologías incipientes como el hidrógeno verde o las microgrid.
En las tecnologías más consolidadas, en el último año Ingeteam ha diseñado las mayores plantas fotovoltaicas en España y el mundo, instaladas en Extremadura y Emiratos Árabes, respectivamente. Además, Iberdrola Renovables Energía ha adquirido recientemente un novedoso aerogenerador de seis megavatios para la región, en colaboración con Siemens Gamesa.
Otro de los ámbitos en el que Navarra está asumiendo un rol protagonista es el repowering, un hot topic en la industria eólica. El término hace referencia al proceso para ampliar el ciclo de vida de los aerogeneradores reacondicionando sus componentes y facilitando la recuperación de materiales o el reciclaje de palas. En este ámbito ya trabajan numerosas empresas navarras trabajando para extender la vida útil de los parques navarros y replicar el proceso en otros puntos del globo.
Grupo Enhol es una de las firmas más destacadas en este ámbito. En opinión de su CEO, Diego Oliver, en Navarra “tenemos la oportunidad de ser pioneros en esta área”. De ahí que un conglomerado de empresas, del que forma parte su compañía, haya unido sus fuerzas para liderar un programa al que han denominado ‘R3-Economía Circular’. Con él, proyectan impulsar “el reacondicionamiento de componentes, la recuperación de materiales y tierras así como el reciclaje de los ‘composites’ (plásticos) usados en la fabricación de aerogeneradores”.
"En Navarra tenemos la oportunidad de ser pioneros en el área de repowering ampliando del ciclo de vida de los aerogeneradores".
Diego Oliver
Grupo Enhol
Las oportunidades del hidrógeno verde
Pero probablemente el área que a mayor ritmo crece en la industria de renovables navarra sea el del hidrógeno verde. En la región están convergiendo numerosos esfuerzos para hacer realidad esta industria “tan prometedora, especialmente enfocada a procesos industriales”, como la definen desde Grupo Enhol. Acciona Energía por ejemplo, está trabajando para implantar en la región un gran centro de producción de hidrógeno verde como el que la firma ya tiene en Mallorca. CENER, por su parte, trabaja en un sistema de producción de hidrógeno a alta temperatura que promete mayor efectividad.
De igual forma, en Nordex están actualmente desarrollando la fabricación de electrolizadores en la región, un ámbito en el que consideran que Navarra puede repetir el éxito cosechado con la energía eólica. “Hay muchas sinergias en las capacidades que se necesitan para desarrollar una turbina eólica y las que creemos que se necesitan para producir un electrolizador en cuanto a materiales y conocimientos Nuestra intención es desarrollar una tecnología que el mundo compre y Navarra exporte”, explica José Luis Blanco, CEO de Nordex.
El propio Ejecutivo navarro es consciente de las oportunidades que esta tecnología puede brindar a la región, como muestra el reciente acuerdo para coimpulsar junto con Cataluña, País Vasco y Aragón el primer valle transfronterizo del hidrógeno verde en Europa.
“Nuestros clientes nos piden cada vez más que descarbonicemos. Y creo que va a ser un factor de competitividad futuro. El que esté descarbonizado venderá más y el que no…”.
Jesús Calavia
Viscofan
Un tejido industrial más sostenible
Pero los esfuerzos por impulsar las renovables no son exclusivos de las empresas de la industria energética. Numerosas empresas industriales están incorporando a sus modelos actuaciones para descarbonizar su actividad, como respuesta a las demandas de sus grupos de interés.
Un ejemplo de ello es la empresa de productos cárnicos Viscofan, en cuya planta de producción se incorporó el año pasado el hidrógeno verde como sustituto del gas natural. “Nuestros clientes nos piden cada vez más que descarbonicemos. Y creo que va a ser un factor de competitividad futuro. El que esté descarbonizado venderá más y el que no…”, refiere Jesús Calavia, CEO de la firma.
Otro interesante ejemplo es la microgrid industrial instalada en la planta navarra de Schneider Electric, la primera que opera en España. Gracia a este proyecto, el 50% de la materia prima que consume la fábrica ya es reciclada. “Es un proyecto que aúna la producción de energía renovable ‘in situ’, el almacenamiento en baterías y la instalación de puntos de recarga para vehículos eléctricos con el fin de conseguir la máxima autonomía y optimizar el consumo en red”, indica Raquel Gascó, ‘plant manager’ de Schneider Electric Navarra.
La propia Gascó arroja luz sobre otro importante aspecto para impulsar la industria de las renovables en la región: la concienciación o, como ella misma dice, “crear un relato para involucrar en el cambio a la ciudadanía”. Para contribuir a ello, desde el Ejecutivo navarro se están impulsando diversas acciones de divulgación, como la colaboración en la organización del Congreso de Autoconsumo de Navarra que cuenta ya con tres ediciones a sus espaldas, el Congreso Europeo de Comunidades Energéticas, que este otoño celebrará su segunda edición o la ronda de sesiones informativas en el marco de la colaboración con la Federación de Navarra de Municipios y Consejos.