- La industria de las Energías Renovables en la Comunidad foral supera el centenar de empresas, genera 6.400 puestos de trabajo y su facturación, de unos 4.500 millones de euros, representa el 5 % del PIB regional. Además, Navarra cuenta con CENER, centro nacional de referencia en I+D en este sector, Cenifer, organización dedicada a la Formación Profesional, así como un clúster específico, Enercluster.
- Nordex, Iberdrola, FCC, Acciona Energía, MTorres o Siemens Gamesa… Las inversiones en I+D previstas por empresas dedicadas a las energías renovables en Navarra son numerosas y abarcan líneas de investigación tan importantes como el hidrógeno verde, el almacenamiento en baterías, el desarrollo de electrolizadores o, incluso, la configuración de nuevos modelos de aerogeneradores, entre otros proyectos.
- “La presencia en Navarra de empresas tractoras líderes en energías renovables con centros de decisión en la Comunidad foral suponen una oportunidad estratégica inigualable para todos aquellos agentes del sector que quieran diferenciarse a través de una inversión basada en la I+D+i”, asegura Mikel Irujo, consejero de Industria y de Transición Ecológica y Digital Empresarial.
Nabrawind anunció recientemente un acuerdo con las autoridades chinas para la instalación en aquel país de una de sus torres “autoizables” de 190 metros de altura, lo que la convertirá en la más alta desarrollada íntegramente por una empresa 100 % navarra. Además, con este proyecto establecerá una nueva marca mundial.
En concreto, la empresa, con más de 40 empleados, proyecta facturar entre 10 y 15 millones de euros. Por otro lado, la investigación y el desarrollo (I+D) impulsan sus productos con veintiocho solicitudes de patentes, diecisiete de las cuales están publicadas y once ya concedidas. Cada patente concedida forma una familia, lo que resulta en un total de 43 patentes otorgadas en casi una docena de países, incluidos Estados Unidos, China, India, Brasil, Alemania, Dinamarca, Reino Unido, Suecia y España.
La propuesta de Nabrawind es un ejemplo paradigmático del I+D en energías renovables que se realiza en Navarra. Otro caso similar es el de Celsos, una empresa derivada del Centro Nacional de Energías Renovables (CENER), que ofrece servicios de inspección de módulos fotovoltaicos mediante el uso de drones equipados con cámaras de electroluminiscencia y software de Inteligencia Artificial.
Dirigida por Enrique González e Íñigo Les, CEO y CTO respectivamente, la compañía ha proporcionado sus servicios a instituciones como la Universidad de Ciencia y Tecnología Rey Abdalá en Arabia Saudí y ha realizado proyectos en países sudamericanos como Chile. Con una visión de expansión internacional, planean establecer delegaciones en áreas estratégicas como Estados Unidos, Oriente Medio y Latinoamérica, con el objetivo de agilizar y optimizar sus operaciones de inspección.
González y Les han trazado una ambiciosa “hoja de ruta” hasta 2030, donde esperan que las exportaciones representen el 50 % de sus ventas. Además, tienen claras metas de facturación, buscando ingresos entre 400.000 y 500.000 euros para este año, con la aspiración de alcanzar entre 900.000 y 1 millón de euros para el año 2025.
En esa misma línea hay que situar el trabajo en el área de I+D+i de Ingeteam. Esta tiene en la actualidad con 7 laboratorios de pruebas, donde testea todos los nuevos desarrollos, incluyendo un laboratorio 4.0, dedicado al estudio, diseño y validación de tecnologías de vanguardia como big data, digitalización avanzada, inteligencia artificial o realidad aumentada para su posterior aplicación a los diferentes sectores en los que opera la compañía.
Y, entre sus planes más inmediatos, se encuentra la construcción de un nuevo laboratorio de alta potencia para dar cabida a futuros nuevos desarrollos. A tal fin, Ingeteam recibió un préstamo de 46 millones de euros por parte del Banco Europeo de Inversiones (BEI), para financiar nuevas inversiones en investigación, desarrollo e innovación (I+D+i).
Nabrawind, Celsos e Ingeteam, en definitiva, no son casos aislados. Firmas tan relevantes como Nordex, Iberdrola, FCC, Acciona Energía, MTorres o Siemens Gamesa ya han anunciado importantes inversiones en I+D+i renovable en campos tan diversos e importantes como el hidrógeno verde, el almacenamiento en baterías, el desarrollo de electrolizadores o, incluso, la configuración de nuevos modelos de aerogeneradores, entre otros.
Nabrawind, empresa 100 % navarra, establecerá una nueva marca mundial con la torre "autoizable" de 190 metros que instalará en China
Muchas de esas iniciativas se desarrollarán de forma experimental aquí para implementarse en otras partes del mundo. Otras, sin embargo, se quedarán en esta región. Sea como fuere, ambas son la cara y la cruz de una misma moneda. Constatan el robusto ecosistema en I+D renovable que posee Navarra y que, hoy por hoy, le permite liderar este apartado a nivel europeo.
Una oportunidad estratégica inigualable
En realidad, la industria de las Energías Renovables en Navarra supera el centenar de empresas, genera 6.400 puestos de trabajo y su facturación, en torno a los 4.500 millones de euros, representa el 5 % del PIB regional. La consecución de estas cifras hay que situarlas en un contexto, finales de la década del siglo pasado, en el que la Comunidad foral hizo una apuesta estratégica por este sector. A ese espíritu pionero le han seguido una serie de medidas y decisiones que han reforzado el posicionamiento de Navarra hasta convertirla en todo un referente para el sector a nivel europeo.
A dicho logro también han contribuido la presencia en la región de entidades y organismos específicos entre cuyos propósito está impulsar su I+D (como por ejemplo, CENER), facilitar la formación (gracias a Cenifer); o el establecimiento de sinergias empresariales para impulsar y desarrollar nuevas e innovadoras líneas de negocio de carácter colaborativo a través de Enercluster. Igualmente, ha sido fundamental la decisión de las autoridades comunitarias de impulsar de forma decida la transición ecológica para lograr un continente “neutro” en emisiones para 2050 así como la inclusión de las energías renovables dentro de la Estrategia Sostenible de Especialización Inteligente (S4) navarra.
La combinación de esos factores explica el ecosistema del que disfruta la Comunidad foral y que su consejero de Industria y de Transición Ecológica y Digital Empresarial, Mikel Irujo, define como “una oportunidad estratégica inigualable para todos aquellos agentes del sector renovable que quieren diferenciarse a través de una inversión basada en la I+D+i”.
Efectivamente, para todos ellos, Navarra ofrece numerosas oportunidades, ventajas y oportunidades. Es el caso, por ejemplo, del Centro Nacional de Energías Renovables (CENER). Su director general, Pablo Ayesa, recuerda que llevan más de 20 años “contribuyendo al desarrollo de la industria verde de forma colaborativa”. “Hemos ayudado a mejorar la eficacia de una tecnología que se ha convertido en altamente fiable, segura y muy competitiva”, comenta.
Por lo que respecta a sus áreas de trabajo e investigación, a la generación eléctrica y térmica han añadido la integración de sistemas, el almacenamiento eléctrico y térmico, el hidrógeno a altas temperaturas, los electro combustibles o el acoplamiento de sectores. “Las industrias tecnológicas basadas en energías renovables o bioprocesos que deseen expandirse debieran, sin duda, considerar a nuestra región como una sólida posibilidad para desarrollar su plan de negocios”, afirma Pablo Ayesa.
CENIFER Y ENERCLUSTER
Otras entidades navarras referentes para los agentes de la industria son Cenifer y Enercluster. El primero de ellos es el Centro de Referencia Nacional en Energías Renovables y Eficiencia Energética, el primero de este tipo en Europa dedicado a la formación profesional para el sector. Más de 5.000 personas han sido salido capacitadas de sus 17 aulas y laboratorios en los que desempeñan su labor educadora un total de 22 instructores a tiempo completo.
Enercluster, por su parte, es una entidad privada sin ánimo de lucro cuya vocación es servir de herramienta para la colaboración entre las empresas de la industria renovable y, de este modo, crecer en competitividad y valor añadido. Sus dos objetivos principales son, en ese sentido, fortalecer la colaboración del tejido empresarial renovable de la Comunidad foral y, al mismo tiempo, representar al sector con una voz única y fuerte. En la actualidad engloba a un total de 77 asociados.
Su gerente, Iker Chasco, recuerda que forman parte del Sistema Navarro de Innovación (SINAI) de tal forma que, “además de promover activamente las oportunidades de innovación” entre sus asociados también ofrecen “apoyo a todas aquellas empresas que buscan un socio específico para poner en marcha un proyecto innovador”. “El entorno de conocimiento que existe en Navarra, con entidades de I+D como CENER, universidades y otros centros de innovación, ha sido un elemento crucial para que nuestra región sea uno de los principales centros de la industria renovable en Europa”, apunta.
A partir de ahí, entre los próximos retos que se plantean en Enercluster, mencionan consolidar “un entorno que facilite la innovación con recursos y conocimientos como elemento diferenciador de la Comunidad foral frente a otras regiones europeas y del resto del mundo”.
“NAVARRA OFRECE UN SÓLIDO ECOSISTEMA DE INVESTIGACIÓN. LAS INDUSTRIAS TECNOLÓGICAS BASADAS EN ENERGÍAS RENOVABLES QUE DESEEN EXPANDIRSE DEBIERAN, SIN DUDA, CONSIDERAR A NUESTRA REGIÓN COMO UNA SÓLIDA POSIBILIDAD PARA DESARROLLAR SU PLAN DE NEGOCIOS ”.
PABLO AYESA
Director general de CENER
Las principales firmas de renovables preparan grandes inversiones de I+D en Navarra
En un futuro próximo, la población mundial alcanzará los 9.000 millones de habitantes, según la ONU. Este crecimiento, especialmente en países emergentes, requerirá un suministro constante y asequible de energía para mantener un nivel de bienestar. La Agencia Internacional de la Energía anticipa un aumento del 70 % en la demanda de electricidad hasta 2040, con un 40 % proveniente de fuentes renovables como la energía eólica y solar. Este cambio hacia la energía verde será crucial para el desarrollo económico y la sostenibilidad del planeta. Todo un reto para lograr sistemas de producción de energía cada vez más eficientes y optimizados.
Ante ese horizonte, la Comunidad foral será escenario de importantes proyectos vinculados a I+D renovable. Así, Nordex, sin ir más lejos, ha elegido que en su sede de Barasoain se diseñen y fabriquen electrolizadores de hidrógeno. Mientras, Iberdrola y FCC promoverán la primera planta de reciclaje de palas eólicas de España y Europa en lo que supondrá una inversión de diez millones de euros que generará cien puestos de trabajo.
Otro proyecto destacado es el de Acciona Energía que tiene previsto implementar en Sangüesa un centro de producción de hidrógeno verde junto a una microrred que combine las energías solar, fotovoltaica y eólica para facilitar la “electrificación” de industrias de consumo “termointensivo”.
Además, Ibedrola Renovables Energía ha adquirido un aerogenerador de seis megavatios para la región, un proyecto en el que participa también Siemens Gamesa. Esta última destaca su próxima inversión “de más de 400 millones” destinados a una nueva configuración de aerogeneradores, así como el diseño de parques eólicos “pensados para entornos de generación híbridas”. Y MTorres, mientras tanto, ha puesto el foco en su propio modelo de baterías de almacenamiento.
Por su parte, KoalaLifter es una start-up 100 % navarra especializada en equipos ‘craneless’ para aerogeneradores. Su tecnología permite operar sin grúa facilitando el transporte e instalación de estos equipos con un solo tráiler y sin necesidad de permisos especiales. Este sistema, desarrollado íntegramente en la Comunidad foral, opera de forma remota, con un único operario y ofrece una alta seguridad. Además, puede funcionar con vientos de hasta 25 metros por segundo, reduciendo significativamente las paradas.
“ADEMÁS DE PROMOVER ACTIVAMENTE LAS OPORTUNIDADES DE I+D+i entre nuestros asociados también ofrecemos apoyo a todas aquellas empresas que buscan un socio específico para poner en marcha un proyecto innovador”.
