La empresa de Ribaforada, líder nacional en snacks salados, logró una cifra de negocio superior a los 135 millones de euros en el último ejercicio. Además, sumó tres nuevas firmas a su consocio: el fabricante de chips vegetales, Viube Foods; la marca Pop Up; y Patatas Fritas Santo Reino, que tiene un centro de producción en Jaén.
“En un año que ha vuelto a ser retador por la coyuntura global, la inestabilidad y la carestía de los precios de las materias primas y de la energía, Grupo Apex ha continuado su estrategia de crecer exponencialmente”, indicaron sus responsables. De esta forma, la firma mantuvo una hoja de ruta basada en estos ejes estratégicos: “doblar tamaño cada cuatro años, ganar presencia en mercados y canales de venta e incrementar el portfolio de productos”.
Asimismo, también invirtió un total de cuatro millones de euros “en capacidad productiva”. Dicho esfuerzo le permitió incorporar “nuevo talento” con el que incrementó “el compromiso y la competitividad” de su equipo humano.
Por otro lado, la empresa, cuyos accionistas desembolsaron una ampliación de capital de 7,55 millones en marzo de este año, mostró en 2022 su capacidad de resiliencia. En concreto, lideró una vez más los crecimientos registrados dentro de su sector de actividad. Una situación privilegiada que mantiene desde hace más de una década.
Como resultado de todo lo anterior, Grupo Apex, con sede central en la localidad navarra de Ribaforada, tiene en la actualidad nueve centros de trabajo repartidos por toda España en los que emplea a 550 personas.
Fuente: Diario de Navarra