La compañía dio a conocer el importante crecimiento experimentado en 2022, tras haber facturado 250 millones de euros en 2021. En la actualidad, Congelados de Navarra cuenta con cinco plantas en España y con oficinas comerciales en Reino Unido, Estados Unidos y Canadá. Además, exporta el 70 % de su producción a “más de setenta” países.
Congelados de Navarra celebró su vigesimoquinto aniversario y anunció que ya factura más de 300 millones de euros al año, con un volumen de exportación del 70 %. Un crecimiento importante para la compañía, que anunció una facturación de 250 millones en 2021.
En la actualidad, el grupo cuenta con cinco plantas de producción en España y oficinas comerciales en Reino Unido, Estados Unidos y Canadá, de forma que ha ampliado su mercado a “más de setenta” países.
Congelados de Navarra comenzó su actividad en 1998 en Arguedas, donde se construyó la primera planta para la producción y comercialización de verduras congeladas. En poco tiempo, se convirtió en el primer fabricante de brócoli congelado de Europa y en el gran especialista de verduras asadas y prefritas. En 2008 se produjo el “gran salto estratégico” con la construcción de una nueva planta en Fustiñana, que ahora acoge las oficinas centrales de la compañía y constituye el principal punto productivo y logístico del grupo. A lo largo de su historia, el crecimiento que ha experimentado la firma ha sido “vertiginoso, pero consolidado”, con una inversión superior a los 290 millones de euros.
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