Entorno institucional y eficiencia empresarial son las principales fortalezas del territorio, mientras que el mercado de trabajo es la dimensión en la que mayores avances se han producido.
Navarra vuelve a ocupar la segunda posición del ranking de competitividad regional. La primera en el ranking vuelve a ser Madrid y le siguen Navarra y País Vasco, según los valores que arroja el índice de competitividad regional (ICRG) realizado por el Consejo General de Economistas de España.
El trabajo, elaborado por investigadores de la Universidad de Murcia analiza lo ocurrido en el ejercicio 2021, que transcurrió en un contexto muy diferente al actual y que, por lo tanto, no recoge ni el impacto de la guerra de Ucrania ni el de la crisis energética. El avance promedio en el conjunto de las 17 comunidades fue del 4,4%.
El índice se calcula a partir de 54 indicadores que se agrupan en siete ejes: entorno económico, mercado de trabajo, capital humano, entorno institucional, infraestructuras básicas, eficiencia empresarial e innovación.
En el caso de Navarra, el dinamismo de la competitividad en 2021 fue “leve” aunque en el análisis de los diferentes ejes alcanza las posiciones más altas en un mayor número de variables siendo primera en el ranking autonómico en dos de ellos: entorno institucional y eficiencia empresarial, las principales fortalezas que explican que su nivel de competitividad, aunque de manera leve y por debajo de la media, haya seguido creciendo en 2021.
El primero de los dos ejes en los que sigue destacando Navarra es el del entorno institucional que analiza variables como el número de delitos por habitante, el déficit de las administraciones, el gasto corriente neto de intereses, el esfuerzo fiscal o la deuda viva por habitante.
El segundo, la eficiencia empresarial, que mide desde el número de empresas con más de 250 trabajadores sobre el total, a la productividad real, pasando por el porcentaje de mujeres empleadoras, los costes laborales unitarios o las empresas exportadoras regulares. Un eje en el que registra un crecimiento moderado con respecto al ejercicio anterior. Además, con respecto al informe de 2020, la comunidad mejora una posición (de la 4º a la 3º) en el eje del mercado de trabajo.