La cooperativa de Villatuerta culminó este lunes los actos de su 50 aniversario con la puesta de largo de la nueva sede del Centro Stirling Navarra. Una infraestructura dedicada a la I+D+i de Mondragon Componentes, que desde su entrada en funcionamiento hace tres años ha contribuido al crecimiento de la compañía.
Embega inauguró el pasado lunes la nueva sede del Centro Stirling en Navarra y confirmó que la firma destinará un 10 % de su volumen de negocio a inversiones en 2023. Así, uno de los proyectos que se verán beneficiados por dichos recursos será una nueva célula de fabricación con sistema de inspección por visión artificial para el sector del automóvil. Un desarrollo que ya realizó el pasado año y que ahora contempla duplicar.
Dicho esfuerzo inversor se une, en este caso, a otros desarrollados previamente como una línea de serigrafía con sala blanca o varias células robotizadas para la línea de negocio de metales estéticos.
“Todo ello hace que nuestros clientes, entre los que se encuentran grandes grupos como BSH, Electrolux, Miele, Simon, Ingeteam, Jofemar, Atlas Copco o BHTC, renueven la confianza en nosotros y nos haya permitido fortalecer la internacionalización de la cooperativa” destacó Asier Toledano, director general de Embega. En la actualidad, la exportación supone más del 60 % de su volumen de negocio.
La cita sirvió, además, para la inauguración de las nuevas instalaciones del Centro Stirling Navarra (CS) en Villatuerta, dedicado a la I+D+i. Una infraestructura que, desde su puesta en funcionamiento en 2019, ha contribuido al crecimiento de la compañía, con una apuesta decidida por la innovación y la diversificación.
Muestra de ello es que la facturación de la cooperativa ha aumentado un 36,8 %, pasando de los 8,77 millones de euros registrados hace tres años a los 12 millones con los que prevé cerrar 2022. Igualmente, ha permitido pasar, en ese mismo período de tiempo, de 108 a 134 empleados (+24 %). Por ello, el director general de Embega remarcó que la puesta de largo del centro, en el que trabaja un equipo investigador de nueve personas, supone “un paso adelante para seguir avanzando”.