La factoría navarra, que emplea a 70 personas, superó en el último ejercicio las 100.000 toneladas de producción al tiempo que su red de distribución comercial rebasó la veintena de mercados repartidos a lo largo de todo el mundo. Además, la filial de Caja Rural de Navarra ha recibido más de 5 millones de euros en subvenciones por parte de la Dirección General de Fomento Empresarial. Actualmente, Harivenasa tiene como objetivo “acercar la avena a todos los hogares, contribuir al bienestar de las familias y al desarrollo de la economía local”.
Estos datos se dieron a conocer durante la visita del consejero de Industria y de Transición Ecológica y Digital Empresarial del Gobierno de Navarra, Mikel Irujo, a la sede de la firma en la localidad navarra de Etxarren. En el encuentro también estuvieron presentes Javier Berazaluce, responsable de Desarrollo de Inversiones de Caja Rural; Alberto Loizate, director general de Harivenasa; y Ana Carreras, directora de marketing de la empresa, quienes explicaron la evolución de la compañía y los desafíos que han enfrentado.
La marca comercial de la compañía, ‘Alea’, está presente en mercados tan variados como el de Kenia o el Líbano y sus responsables se han marcado como principal objetivo incrementar su presencia fundamentalmente en el continente africano. Igualmente, otra de las líneas de trabajo en la que han decidido volcarse tiene que ver con la sostenibilidad de su proyecto. Así, por ejemplo, su centro de producción de Etxarren está dotado con las últimas tecnologías y cuenta con las máximas cualificaciones medioambientales en cuanto a consumos eléctricos y de otros recursos vinculados con su funcionamiento diario.
Por otro lado, trabajan el desarrollo local para lo que utilizan como base de su producción una materia prima de proximidad o ‘kilómetro cero’ elaborada por productores locales, situados como máximo en un radio de 100 kilómetros alrededor de su factoría. Y a todo lo anterior hay que añadir, igualmente, una tercera apuesta basada en la sensibilización y la formación con centros educativos con los que mantiene diversos acuerdos para que los más pequeños no solo conozcan el entorno natural sino que, además, se familiaricen con el consumo habitual de avena, dentro de una práctica que pretende impulsar el desarrollo de hábitos y formas de vida saludables desde las edades más tempranas.
En ese sentido, Harivenasa constituye otro ejemplo de referencia dentro de un sector agroalimentario navarro que, en su conjunto, registra una facturación anual superior a los 4.500 millones de euros, de los que 1.129 corresponden al sector primario. Además, esta actividad supone el 5 % del total del PIB regional y el 14 % del PIB industrial. Sus exportaciones representan el 12 % del total de las ventas que la Comunidad foral realiza fuera de sus fronteras y emplea a más de 25.000 personas, tal y como se refleja en el informe que detallamos dentro de nuestro apartado “Sectores Estratégicos de Navarra” y al que puede acceder a través del siguiente enlace.
Fuente: diariodenavarra.es